En medio de la incertidumbre que se vive en torno a la pandemia del coronavirus se encuentra un hecho incontrovertible: las personas mayores tienen el índice más alto de muertes, sobre todo quienes tienen padecimientos preexistentes.
Al día de hoy, de todos los casos confirmados en China casi el quince por ciento de los pacientes de más de 80 años, ha muerto, mientras que de los afectados que tienen menos de 50, el índice de mortalidad era de menos del uno por ciento.
Sin embargo, los expertos dicen que, si las personas de más de 60 años se infectan, es más probable que sufran una enfermedad grave que amenace su vida, aunque su salud general sea buena. Las personas mayores con padecimientos médicos subyacentes están expuestas a un riesgo particularmente alto. Los expertos le atribuyen parte de ese riesgo a un debilitamiento del sistema inmune debido a la edad.
Eso hace que las familias se pregunten cuáles son las precauciones adicionales que deben tomar. Hay varias prácticas ideales que han sido recomendadas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés), la Organización Mundial de la Salud (OMS), los geriatras y los especialistas en enfermedades infecciosas.
Creer que no enfermarán porque están bien, es una fantasía:
Los adultos mayores de 60 años, todos tienen al menos un padecimiento crónico. “La mayoría tiene tres, cuatro, cinco o más. La gente se equivoca al asumir que, si un padecimiento médico se gestiona adecuadamente mediante tratamiento, está fuera de peligro. Incluso quienes tienen padecimientos y se encuentran estables deben tener precauciones adicionales”, dijo Annie Luetkemeyer, especialista en enfermedades infecciosas, y agregó: “estos padecimientos pueden limitar la reserva subyacente y llevar a peores resultados cuando las personas mayores se enferman de gravedad, lo cual afecta a todos los sistemas de órganos. La gente se equivoca al asumir que, si un padecimiento médico se gestiona adecuadamente mediante tratamiento, está fuera de peligro. Incluso quienes tienen padecimientos y se encuentran estables deben tener precauciones adicionales.
“La diabetes, por ejemplo, puede hacer que sea más difícil combatir una infección, y un padecimiento cardiaco o pulmonar subyacente quizá dificulte que esos órganos sigan el ritmo de las exigencias provocadas por una infección grave de COVID-19”, dijo, refiriéndose al síndrome causado por el nuevo coronavirus.
¿Qué pasa con las citas médicas no esenciales?
Algunos expertos están recomendando que los adultos mayores en riesgo cancelen las citas médicas no esenciales, incluyendo las visitas de bienestar. En caso de ser posible, hacer las consultas vía telefónica. En los casos que sea posible, hablar con el medico de cabecera o de Pami, para acumular dos o tres meses de medicamentos esenciales con receta.
Tener cuidado con el aislamiento social
Los expertos advierten que el distanciamiento social, el pilar del control epidémico, podría causar aislamiento social, que ya es un problema en la población de la tercera edad. De acuerdo con un estudios recientes realizados en más de 130 países y territorios, el dieciséis por ciento de las personas de 60 años o más viven solas. La soledad, según hallazgos de los investigadores, implica su propio conjunto de riesgos de salud. Consciente del peligro, han sugerido a sus padres o abuelos que organicen reuniones virtuales con amigos y familiares, pues tiene en mente los beneficios de la participación social. Usar aplicaciones como Zoom, Skype, FaceTime o telellamadas de whatsapp.
Charla con los asistentes de atención médica en el hogar
Verifica dos veces que los encargados de los cuidados se laven las manos o usen gel antibacterial. Cualquier equipo que traigan debe limpiarse con desinfectante. Además, asegúrate de que se sientan sanos. Para quienes están solos, quizá estén en una posición muy vulnerable porque dependes de las personas que los cuidan o asisten, y en estos casos hay que generar una buena relación como para pedir las medidas de higiene necesarias.
Las visitas de sus hijos y/o nietos están prohibidas:
Los geriatras recomiendan a sus pacientes que se apeguen a las recomendaciones actuales de los CDC y la OMS, una letanía de consejos que se han vuelto bastante conocidos: lávate las manos frecuentemente con jabón y agua tibia durante veinte segundos o limpiarlas con un gel a base de alcohol; evita estrechar manos; aléjate de todo tipo de reuniones; limpia y desinfecta objetos que se toquen con frecuencia; evita el transporte público y las multitudes. Abastecerse de provisiones y no salir al exterior por ningún motivo que no sea emergencias. También se debe evitar las visitas de familiares, exceptuando quienes dependen de otras personas para su atención. Los hijos o nietos deberían facilitar los encuentros virtuales, por teléfonos o computadoras, evitando que estos sean presenciales.