“En Laboratorios Ramallo todos los días despiden gente” dicen los trabajadores de la firma en cuestión, la cual está ubicada en Agustín Rocca 530, Ramallo, dónde según sus obreros “Todos los días despiden gente y toman a la semana, hasta el refrigerio sacaron y se trabaja a destajo”.
“Para ir al baño hay que pedir por favor, de la cantidad de cámaras que hay parece un Gran Hermano”, indicaron trabajadores acerca de la hostilidad por la que estarían pasando.
“Hay un sector minoritario de operarios-pero no menos importante- al que la empresa ya le anunció que a partir del 22 de diciembre y hasta el 22 de enero, se tomarán vacaciones; NO PAGAS”, denuncia la fuente, agregando más preocupación a los más de 250 empleados que quedan en la actualidad, luego del recambio y despidos constantes que estarían sufriendo.
“Hasta hace poco eran 300 operarios, hoy quedan 250 más o menos. Su política de despidos es por demás de interesante, por lo perversa: van echando de a dos o tres, máximo, de común acuerdo con los despedidos, de manera de evitar grupos que se le amotinen. Está prohibida la actividad sindical, al que rompa esa regla, queda automáticamente despedido”, expresaron en dialogo con un medio nicoleño denunciando una presunta realidad que, de ser así, traspasaría la línea de la legalidad.
Obviamente, la pregunta que sucedió a semejante declaración fue ¿Y el gremio? “No hay gremio o, por lo menos, el gremio que alguna vez se hizo presente, no sirve. Entre fin de este año y marzo del año que viene, les tiene que quedar un plantel de 150 personas”, lo que implicaría despidos de 100 operarios aproximadamente.
La perversidad que se denunció en esta nota sería aplicada por el directorio de la firma, del cual, formaría parte, Andrés Quinteros.
“Gozan de una impunidad tremenda, ¿por qué?, porque tienen de socios a algunos políticos. Uno de ellos es el tan mentado Andrés Quinteros, que una vez por mes, por lo menos, anda por las instalaciones haciendo sociales”.
De comprobarse esta denuncia, se estaría hablando de un funcionario público que estaría explotando a sus empleados. La fuente señala que Quinteros “es un accionista principal. De hecho fue él quien creó las condiciones legales para que el laboratorio se instalara”
En esta conversación la fuente expresa repudio al “cerco mediático del que gozan los dueños”, refiriéndose tanto a ésta situación de presuntos despidos y maltratos como también al accidente de junio pasado, que “sirvió para que blanquearan al personal”.
“En junio pasado, explotó un compresor, hiriendo a varios operarios. Entre ellos, tres de gravedad. Los dueños siempre se negaron a dar explicaciones y demás”
Se estaría hablando de presuntas nuevas inversiones por parte de los dueños de Laboratorios Ramallo, a costa de la explotación y flexibilización que denuncian sus empleados. Estas nuevas inversiones serían de la misma rama (droguerías) en la ciudad de Rosario.
Los operarios que, mayormente, oscilan entre los 25 y 35 años, son responsables de sus familias y por ello, se verían obligados a callar.
Fuente: Prensa Libre SN
