La crisis en el sector siderúrgico argentino sigue profundizándose. La planta de Acindar en Villa Constitución ha informado que su producción se mantendrá paralizada durante al menos cuatro de los próximos seis meses del año. Esta decisión se debe a la abrupta caída de la demanda industrial, según comunicaron los directivos de la empresa al gremio Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
Inicialmente, Acindar había previsto un parate de tres semanas en su producción, pero las circunstancias han cambiado drásticamente. Los directivos ahora notificaron que la planta podría operar solo dos de los seis meses restantes de 2024. Este anuncio marca un nuevo capítulo en la crisis de la siderúrgica más importante de Santa Fe, agravada por la caída de la inversión privada y la desaparición de la obra pública, que han provocado una retracción del 40% en las ventas de productos metalúrgicos.
La planta de Acindar, parte del grupo Arcelor Mittal, ya había detenido su producción entre marzo y abril durante casi un mes. A esta suspensión se sumó otra el 14 de junio, inicialmente programada para tres semanas. Sin embargo, la situación se ha deteriorado aún más. Las autoridades de la planta comunicaron a los líderes sindicales de la UOM que la planta no operará por 120 a 135 días, lo que equivale a un parate de al menos cuatro meses.
La capacidad instalada en la industria metalúrgica ha disminuido notablemente, con una baja de 10 puntos interanuales en el sector. Acindar, que solía producir 1,2 millones de toneladas anuales, ahora produce solo 600 mil, reflejando la caída en la industria de la construcción, su principal cliente. «Hace veinte años que trabajo en la fábrica y nunca hubo un nivel de producción tan bajo», comentó González, anticipando un posible conflicto similar al de 1991, que duró más de tres meses.
La Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe) reportó una caída del 14% en la producción industrial en el primer cuatrimestre del año, mientras que la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Adimra) señaló una retracción del 21,1% en la actividad metalúrgica en la provincia. El 90% de las ramas industriales en Santa Fe registraron una caída interanual en abril, afectando significativamente a sectores como la producción de vehículos automotores, la industria siderúrgica, y la maquinaria agropecuaria.
El sector metalúrgico ha sido particularmente castigado por el freno en la actividad económica y la caída del consumo, acumulando una retracción del 8,9% en los primeros cinco meses del año. La prolongada parálisis de Acindar en Villa Constitución es un reflejo de la crisis más amplia que enfrenta la industria siderúrgica y metalúrgica en Argentina.
