Las historias de amor no siempre son como las de los cuentos o las novelas. Los finales felices son tales, en tanto sean extraordinarios, por lo que esperar que todo sea “color de rosa” en una relación es –cuanto menos- una utopía.
En las redes sociales, muchos suelen publicar cartas que no necesariamente buscan una respuesta, algo así como si escribir algo fuera como “gritarlo a los cuatro vientos”. Este es uno de esos casos.
Todo sucedió el pasado 16 de noviembre, minutos antes de las 10 de la mañana. El protagonista, según la fotografía que acompañó el texto, mostraba a un hombre acostado en la cama de una sala de internación con una mujer dormida a su lado, en aparente situación de ser su acompañante.
Casi como si necesitara aclararlo, la “carta” comienza aclarando que la mujer en cuestión es su ex novia y que llevaba 7 meses separado de ella: “…en el trascurso de ese tiempo cada cual hizo su vida como quiso y con quien quiso. Ella tuvo sus éxitos y yo mis fracasos, llegamos hablar mal el uno del otro y hasta decirnos cosas inadecuadas el uno al otro”, explicó.
Sin embargo, y como suele suceder cuando hay un momento que significa una bisagra en la vida, todo cambió. O no tanto.
“Llevo 7 días internado en un hospital”, siguió el descargo, “y desde que se enteró que mi situación se complicó algo más de lo que esperábamos y que el problema no solo era mi pierna, lleva 4 días durmiendo en esa silla sin moverse esperando mi recuperación”. En un acto de amor, ella dejó sus actividades y compromisos por no dejar a su ex novio sólo, incluso a pesar de que él le pidió varias veces que se vaya a su casa. “A veces se enoja y sale de la sala enojada. Yo me duermo y cuando despierto ella vuelve a estar sentada al lado mío esperando que me recupere para llevarme a mi casa”, continúa el emotivo relato.
El protagonista de la historia, reflexionó que cuando uno toca fondo, se da cuenta de que a veces se cambia oro por cobre y lealtad por interés. “Tuve mil amigos abrazándome falsamente y me dijeron te amo sin sentirlo, pero solo quien valora lo que fuiste una vez como persona en su vida se quedará al lado tuyo cumpliendo su palabra de estar en las buenas y en la malas”, escribió.
Según cuentan en Nay Tattoo Estudio, de Villa Ramallo, la palabra más elegida para imprimir sobre la piel en 2018 fue “soltar”, término relacionado con el dejar fluir las cosas y principalmente las relaciones que se tornan tóxicas. Probablemente, el protagonista de esta historia haya pensado en ese concepto al cerrar su carta dirigiéndose a su ex: “Ojalá que el afortunado que acompañe tu vida valore lo que yo no valoré y se dé cuenta que una mujer así de compañera como vos ¡no se encuentra a la vuelta de la esquina! Voy a estar eternamente agradecido x todo lo que hoy haces por mí”.
y compromisos por no dejar a su ex novio sólo, incluso a pesar de que él le pidió varias veces que se vaya a su casa. “A veces se enoja y sale de la sala enojada. Yo me duermo y cuando despierto ella vuelve a estar sentada al lado mío esperando que me recupere para llevarme a mi casa”, continúa el emotivo relato.
El protagonista de la historia, reflexionó que cuando uno toca fondo, se da cuenta de que a veces se cambia oro por cobre y lealtad por interés. “Tuve mil amigos abrazándome falsamente y me dijeron te amo sin sentirlo, pero solo quien valora lo que fuiste una vez como persona en su vida se quedará al lado tuyo cumpliendo su palabra de estar en las buenas y en la malas”, escribió.
Según cuentan en Nay Tattoo Estudio, de Villa Ramallo, la palabra más elegida para imprimir sobre la piel en 2018 fue “soltar”, término relacionado con el dejar fluir las cosas y principalmente las relaciones que se tornan tóxicas. Probablemente, el protagonista de esta historia haya pensado en ese concepto al cerrar su carta dirigiéndose a su ex: “Ojalá que el afortunado que acompañe tu vida valore lo que yo no valoré y se dé cuenta que una mujer así de compañera como vos ¡no se encuentra a la vuelta de la esquina! Voy a estar eternamente agradecido x todo lo que hoy haces por mí”