El vendedor de productos regionales hizo su descargo y desmintió a la Policía.
Se trata de Pablo Sebastián Carrizo, integrante de la Pyme “Regionales del Litoral”, que aceptó el derecho a réplica de Ramallo Informa para aclarar lo sucedido y desmintió la versión de la policía.
Recordemos que el viernes, un mensaje circuló en Whatsapp advirtiendo (aunque no se especificaban los riesgos) que había una camioneta blanca recorriendo la ciudad vendiendo productos regionales y que un policía le había avisado a los vecinos que no le abriera la puerta al vendedor. Minutos después, fue la Comisaría 1ra. la que explicó que efectivamente un llamado de un vecino había avisado y que identificaron al vendedor. Luego de verificar que no tenía los papeles en regla les indicó que se retiraran del distrito.
Carrizo nos envió el permiso firmado por Bromatología y aclaró: “Ayer entramos (a Ramallo) con una Kangoo modelo 2003 y una Fiorino que manejaba yo modelo 1998. Estoy contento porque nos llamaron de todos lados pidiéndonos disculpas. La misma policía, Erik el sargento de turno, también nos dijo que la gente de pueblo es así. Aprendimos una gran lección: a Ramallo y los pueblos chicos no hay que ir. Por lo general vamos a Junín, Pergamino, Venado Tuerto, ciudades grandes donde esto no pasa, pero esto que hicimos ayer fue pidiéndole permiso a la Municipalidad. Me sale más barato estar en regla que darle de comer a la policía, con una coima”.
Luego contó que está vendiendo desde 2015. “Soy un tipo que se quedó sin laburo y que salió a buscárselas a la calle. Tengo 3 camionetas equipadas, debidamente inscriptas en SENASA, porque te imaginarás que al ser de Entre Ríos no podríamos trabajar. Tenemos un montón de cruces de policías, inspecciones sanitarias, Gendarmería… no podríamos trabajar sin la habilitación. Somos 9 vendedores y tenemos un frigorífico que nos respalda, que tiene familias trabajando de esto. Cobramos por SENASA, tenemos ART por Río Uruguay Seguros, estamos en regla. No andamos robando”.
