En el día mundial de los humedales, un referente de UPVA habló sobre la situación actual.
Cada 2 de febrero se celebra el día mundial de los humedales, en la que las organizaciones sociales, ciudadanos y organismos oficiales aprovechan para aumentar la sensibilización sobre los beneficios que brindan estos ecosistemas únicos, sobre todo ante las amenazas del cambio climático.
Nicolás Cerretani es un referente de la UPVA (Unidos por la Vida y el Ambiente), una de las instituciones que permanentemente intentan visibilizar la problemática en torno al Tonelero, el humedal de Ramallo y que milita para que el Código de Ordenamiento Urbano considere a éste como un sitio histórico y reserva natural.
“El estado del Tonelero, lo que se refiere al humedal, estaría salvado en su mayor parte por las últimas exigencias hechas en el Código en el Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable. Donde antes se iba a instalar el puerto, ahora ya no se puede instalar. Falta que se homologue en La Plata, pero si acataron el pedido de modificación que se emitió desde la Provincia, tendría que haberse cambiado”, afirmó, “Hoy en día, el Tonelero está protegido de forma provisoria hasta que se resuelva que en vez de construir un puerto en ese lugar, se tiene que hacer otra cosa”.
El Tonelero es reconocido históricamente por haber sido escenario de varias batallas navales, especialmente las de 1846 y 1851, cuando el Gral. Lucio Mansilla protagonizó una lucha contra el bloqueo anglo-francés y los invasores brasileños, respectivamente. En 2012, un grupo de arqueólogos de la Universidad Nacional de Luján realizaron la búsqueda de restos arqueológicos pertenecientes a algunas de esas batallas y desde 2013 ha habido idas y venidas para mudar el sitio histórico con la intención de instalar un puerto multipropósito.
“EL OPDS había emitido un dictamen y debería verse reflejado en el código pero aún no se votó. Creemos que por la presión social y las declaraciones de diferentes organismos, va a salir favorable a la conservación del sitio histórico. Había una serie de tentativas de hacerlo en el margen sur del arroyo Marconi, pero quedó en la nada por ahora porque no se avanzó en el COUT”, explicó Cerretani.
Mientras tanto, el referente de UPVA analizó que existe un juego de presiones muy complejo, entre los intereses del empresario, de los distintos partidos a nivel local y nacional, que hacen que la situación definitiva del COUT sea impredecible: “Si bien es cierto que en la oposición de Ramallo hay muchos sectores de acuerdo con la instalación del código, no quieren votarlo para que se lleve los laureles la actual gestión y en Provincia hay un juego político interno en Cambiemos entre sectores liderados por Elisa Carrió, la Gobernadora y el empresario que hacen que todo sea complejo”.