El Momo es un desafío viral que incita, principalmente a los niños, a hacerse daños corporales, podría considerarse el predecesor de la Ballena Azul, aunque este último tenía consecuencias fatales, terminaba con la vida del que lo jugaba. El peligroso desafío virtual, se popularizó el año pasado entre jóvenes usuarios de Whatsapp, esto generó una alerta en padres que también se volvió viral.
María Zysman, psicopedagoga, fundadora de Libres de Bullying y quien lleva años trabajando sobre el uso responsable y seguro de las redes sociales, explica que en el Momo Challenge, el “juego” que se viralizó el año pasado y que fue comparado con el reto de la Ballena Azul, se invita a niños y jóvenes a cumplir retos extremos. Además, se amenaza con castigarlos en caso de desobedecer o recurrir a un adulto. Robo de información; incitación a las autolesiones, al suicidio y a la violencia; depresión; insomnio e extorsión, son algunos de los peligros asociados al desafío.
Pero en este último tiempo la cara del espeluznante personaje junto a su reto comenzaron a filtrarse en videos de Peppa Pig y hasta Fortnite en la plataforma Youtube. Videos que son muy demandados entre los niños y las escuelas dieron la alerta.
“Desde hace unos años hemos notado la aparición de personajes más o menos virulentos, con mayor o menor presencia, que se infiltran en videos que consumen chicos muy chiquitos. Hay motivos reales para preocuparse pero también hay mucho para hacer para mejorar el vínculo de los chicos con la tecnología”, asegura Zysman.
Cuenta que hablando de Momo con los chicos en las escuelas, le pasó como nunca antes “de percibirlos y notarlos realmente asustados”. “Algunos se ponían a llorar pensando que solo con nombrarlo se iba a hacer real. Como no están pudiendo hablar y los padres se asustan pero muchas veces no actúan preventivamente, los chicos están muy asustados”, continúa la especialista.
Según Zysman, para poder acompañar es “imprescindible conocer” y enumera: qué les gusta a nuestros hijos, en qué páginas y sitios se mueven, qué les da miedo, qué necesitan. “Los chicos más vulnerables a caer en este tipo de ‘juegos’ son aquellos que necesitan elevar su autoestima y demostrar que haciendo algo son valientes, son poderosos y salen sanos y salvos de aquellas travesías sin darse cuenta que están jugando con fuego. Momo es un nombre ficticio que se le da a un tipo de actividad que pone en riesgo la salud mental, social, emocional y afectiva de todos nuestros chicos”.