Fuertes críticas al área de turismo. Demasiados reclamos en voz baja y un notable desinterés de la funcionaria del área, está alcanzando la preocupación y hasta el enojo del sector turístico. Si bien ninguno espera del área de turismo vengan al rescate en medio de una tormenta ni que paguen los daños, ya que es parte del riesgo del privado, el dolor por parte de los concesionarios de los paradores, no tardo en salir a la luz, con fuertes críticas frente al desinterés que manifestó también, la actual jefa del área.
Tratamos de no cuestionar con dureza a los funcionarios de un gobierno que con esfuerzo intenta acomodarse a la realidad socio-económica y laboral, y que recién llega al poder proponiendo cambios de prioridades y soluciones, pero dada la gravedad de lo que se avecina, no es posible dejar pasar por alto la ausencia de la Responsable de Turismo local.
Según manifestaron los trabajadores y responsables de los paradores que permanecieron en actividad a pesar de la inundación, no hubo preocupación alguna por parte de la Secretaria de turismo, a pesar de los intentos de ponerse en contacto con la funcionaria. En la primea etapa de la inundación, según manifestaron, no tuvieron la colaboración para detener con un simple vallado, los camalotes lejos de los paradores. De ahí en adelante no se convocó a ninguno para evaluar la situación. Tampoco se consiguió el apoyo de la guardia urbana, solicitado al área de turismo, cuando fueron robados los paradores, cosa que se repitió en reiteradas oportunidades. Por último, manifestaron que el día de la tormenta la Secretaría de turismo no pudo brindar los teléfonos de uno de los paradores para avisar al concesionario que el agua estaba derribando sus instalaciones y arrastrando heladeras y muebles. Nadie de turismo se hizo presente, reclamaron en el lugar.
No sucedió el acercamiento de ningún tipo a los complejos de cabañas dañados por la inundación y la tormenta, según lo que recogimos de sus titulares. Tampoco se emitió oficialmente ninguna medida de prevención ante el avance de la crecida, salvo un escueto aviso de prohibición de bañarse cuando ya estuvo la costa cubierta de camalotes. Prefectura tampoco ha emitido a la fecha ninguna declaración ni medidas.
Este desinterés del ärea de turismo también fue deslizado en el caso de los carnavales, aunque en forma no oficial, trascendió la falta de apoyo del área de turismo a este gran evento que capturo decenas de personas de localidades vecinas en un gran espectáculo con gran visión de futuro, y que desde hace años no se llevaba adelante con la calidad, esfuerzo e inversión que significo el acontecimiento de este año, que además se realizó sin fines de lucro para privados y sin dinero del estado.
No podemos evitar tener en cuenta que tampoco se llevaron adelante eventos turísticos producto de la creciente que impidió las actividades que se venían llevando adelante verano a verano. Aun así, hubo eventos deportivos náuticos llevados adelante por Barlovento, Playa Blanca, el Club Náutico y Cocodrilo, todos con poco o ningún apoyo desde dicha Sub Secretaría. Es decir, los privados pudieron concretar lo que la funcionaria no pudo.
Cabe preguntarse en que se supone que está trabajando la Sub Secretaría de Turismo, ya que tampoco brinda notas a la prensa.
Cabe destacar que Obras Publicas como la Secretaría de Seguridad y la Sub Secretaría de Servicios Publicos, se han ocupado de los eventos privados en el operativos de control y limpieza en la costa, como también de la protección del paseo viva el rio con los terraplenes iniciales y los refuerzos posteriores, pero reclaman la aparición del área de turismo que hasta la fecha, aseguran que no se ha involucrado en ninguna cuestión referente a la problemática turística.
ver notas: https://ramalloinforma.com.ar/sociedad/item/42361-el-parana-crecera-mucho-mas.html y en la seccion clima: «se esperan las peores inundaciones en 50 años»
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