OceanGate confirmó la pérdida de vidas a bordo del mini submarino Titán. Los cinco pasajeros que exploraban los restos del Titanic en las profundidades del océano fueron declarados muertos tras agotarse el oxígeno en la embarcación.
La Guardia Costera de Estados Unidos informó que un vehículo teledirigido descubrió restos en la zona cercana al Titanic, catalogándolos como un «campo de escombros». Los expertos evalúan la información.
La tragedia ocurrió cuando el mini submarino Titán se sumergió a casi 4.000 metros de profundidad en busca de los restos del icónico transatlántico hundido en 1912, a unos 600 km de Terranova, en el Atlántico Norte. Dos horas después de la inmersión, se perdió toda comunicación.
A bordo se encontraban el millonario británico Hamish Harding, el paquistaní Shahzada Dawood y su hijo Suleman, el buceador francés Paul-Henri Nargeolet y Stockton Rush, director de OceanGate Expeditions. La tarifa por turista era de 250,000 dólares.
La Guardia Costera ha confirmado una implosión del submarino debido a la extrema presión en el fondo del océano. Se cree que los pasajeros fallecieron rápidamente sin sufrir asfixia ni dolor.
El contralmirante John Mauger ha mencionado que los restos encontrados son compatibles con una «implosión catastrófica». La búsqueda continúa en busca de respuestas.
Se especula que la presión del agua oceánica pudo haber causado la implosión. La resistencia del casco del Titán pudo haber cedido a la presión a casi cuatro kilómetros de profundidad, superando los 400 kg por centímetro cuadrado.
Los posibles fallos estructurales y la falta de supervisión del submarino agravan la situación. En 2018, se reportaron problemas en los controles de calidad y la falta de clasificación oficial del Titán.
La recuperación de los cuerpos es incierta debido a la complejidad del entorno marino. La Guardia Costera brinda apoyo a las familias y continúa la investigación en el sitio de los escombros para obtener más informacion